En el año 2004 todo era buscar a gente que supliese los puestos de trabajo que dejaban vacantes los baby boom. La generación siguiente, la llamada “Y” no cubrían las necesidades “se demandaba talento”. Hoy con la crisis todo lo ha cambiado. Ya no hay necesidad de cubrir puestos de trabajo, todo lo contrario las empresas pasan a prescindir de muchos cargos directivos. Los que tengan más de "45 años y algunos más (casi una generación de profesionales), tienen sus días contados en las empresas españolas. ¡Hasta ahora era esta mi arriesgada opinión!, y ahora según dicen los expertos, contrastando con lo que está pasando en los Estados Unidos de América, fuentes universitarias como el Centro de Instituciones Financiaras de Wharton lo confirman. Se va a cumplir la dolorosa predicción para muchos empleados directivos. Y de verdad, que hubiese querido equivocarme.  Muchos directivos se van sorprender como el violinista cuando se le rompe una cuerda de su afinado violín y debe de seguir tocando con las restantes. Le faltarán notas,  pero deben de seguir emitiendo música. Hay que sobrevivir.

Todo apunta a que el concepto del empleo ha cambiado. Pasa a ser una demanda basada en proyectos a resolver o crear y como indica Steward Friedman (8) en su libro… “Hay que dejar de ser una economía basada en las organizaciones para pasar a una economía basada en las redes”… “ ser parte de un contrato como fuerza laboral organizado por y con las redes y no por las empresas”. Es decir atender lo que las redes demandan para cubrir necesidades.

Ha nacido una nueva redefinición de las relaciones laborales. A mi entender, una empresa cuando necesitará cubrir una necesidad de personal, pensará más en quién puede resolverle la demanda mediante un contrato que buscar un empleado para ello. Recurrirá a la red social especializada en lo demandado y encontrar la persona/servicio o el grupo/equipo de personas disponibles y mediante contrato realizar el trabajo requerido. Las personas actuarán como agentes afiliados a las redes sociales y que mediante filtros de búsqueda serán detectadas descubriendo sus conocimientos y el talento requerido para resolver.

El empresario contratará soluciones y no empleados para exigirles resultados:

[Cuando acabes bien lo acordado, te pago] vs. [Como no te necesito ya, te tengo que despedir]

La situación de la oferta y la demanda y el surgimiento de la colectividad como una autoayuda moral ante la situación de desempleo, hace que la redes sean la opción de ser encontrados para nuevas tareas profesionales. Por lo menos es una esperanza su desarrollo natural con la TI, que deben de aprender a utilizar a diestra y siniestra.

Un profesor de Estadística y Finanzas (1), de reconocida solvencia,  no tiene reparos en anunciar que: … "por lo menos hasta el 2013, no ve mejoras significativas de empleo". Otro profesor de Gestión y director de Centro de Recursos Humanos (2) de la misma universidad, también anota que antes “los despidos en ese nivel eran temporales. Ahora no."… y que "…empresas que tenías puestos vacantes ahora no lo cubran con personal ni de dentro ni de fuera de su empresa". Es como una radiografía de lo que esta en la mente de los consejos de administración de muchas empresas.

Los trabajadores de mediana edad “tendrán más dificultades para posicionarse en relación con los trabajadores más jóvenes que cuentan con nuevas habilidades” explica otro profesor (3) de la Universidad de Cornell. “En la pasada época el ritmo de los cambios tecnológicos han sido tremendos y conocer nuevas tecnología… hace que los jóvenes tengan más oportunidad en los puestos de trabajo”.

El profesor de Labor Relations at Cornell University plasma la situación como: “Los trabajadores con más de 40 años despedidos se están dando cuanta de que las habilidades adquiridas durante tantos años no están tan demandadas”; “parece ser bastante crudo, incluso cuando la economía empiece a recuperarse de nuevo”.

La empresa Lee Hetch Harrison, resuelve casos de reclutamiento de empresas y aconseja en base a las experiencias que está viviendo y las más importantes que resaltan por su importancia son:

a) Seleccionar muy bien los contactos a llamar. Sobre todo en las redes de contacto.

b) Debes pensar qué te pueden ofrecer y lo qué puedes tú ofrecer.

c) Debes de estar preparado a una reducción salarial del 15 al 30%.

d) Prepararte para “Muchas, muchas entrevistas”

e) Tus contactos son absolutamente críticos. (Cerca del 60% de los empleos no serán publicados en ningún sitio)

f) Los expertos sugieren plantearse trabajar en otro país. (China e India existe una fuerte demanda de gente con experiencia) y esto puede replicarse a todos los países emergentes.

La situación de tantas personas ante la necesidad de tener que emplearse, debe ser una tarea común de todos el aportar soluciones que estén al alcance de su mano. Es de ética ayudar con lo que cada uno pueda, para alertar de cómo y dónde puede aparecer la recolocación, porque en la mayoría de los casos es de lo que se trata, hasta que se active otra vez el comercio internacional. La economía depende de que empresas y sus directivos capacitados logren innovar y crear necesidades para que el consumo despierte de nuevo.

Los directivos maduros son necesarios pero lo que va a cambiar es el modelo de su contratación. La música no puede parar por el bien de todos.

Próximo post:  Mercado laboral de los directivos maduros: Nuevas habilidades y pensamiento lateral (y II)

1.-Francis X. Diebold; 2.-Peter Cappelli; 3.-Mattehew Freedman; 5.-Joyce Bradley; vicepresidenta senior y directora general de Lee Hetch Harrison;  8.- Libro: Total Leadership: Be a Better Leader, Have a Richer Life

Fuente: Universia Knowledge@Wharton