Vaya por delante un máximo respeto por la cultura universitaria y que sin ella seríamos aún más ignorantes. Cómo empresario de la parte ochenta y tresmilava parte del tejido pyme en Catalunya, me siento discriminado por la lección del profesor. Necesito creer que una autoridad universitaria, tiene por objetivo determinante educar y formar a discentes y aportar en momentos difíciles como los actuales consejos la comunidad para ayudar en lo posible a resolver los problemas relacionados con su especialidad académica, en este caso el “progreso empresarial”.  Por la firma esperaba una lección para arremeter y superar los problemas coyunturales de la crisis “económica”. Era el pronóstico personal antes de estudiar el contenido del artículo. Pero no ha sido así, en enfoque sobre que la causa ha sido sobre la actitud y la filosofía de actuación de “sólo” los empresarios es una trasnochada opinión que (me) desconcierta.

Obviar que la económica financiara, la mala política visionaria del “padre” gobierno, la permisividad, la no denuncia de los “maestros” del mal comportamiento esos miles altos cargos, individuos cómplices, que han ejecutado con mala ética las competencias y habilidades aprendidas en universidades y business schools. Son los actores determinantes de haber sembrado para que hoy tengamos pánico en visionar el futuro. ¿O no ha sido así? No hay efecto sin causa y nadie nace enseñado. La máxima de los últimos años en la formación empresarial “todo vale para ganar” ahí nos ha llevado.

Es la hora de las apologías de una situación económica con mensajes que te desconciertan tanto, como cuando hablas con altos cargos en misiones responsables para activar la economía de Catalunya y solo encuentras delante sus rostros por que su mente están a piñón fijo trabajando para asegurar “su silla” y el como “no molestar” a su diosizado jefe. La lección publicada por Orio Amat -Catedrático de economía, en el prestigioso periódico La Vanguardia con le título “Los que avanzan”, es dudar de realidad terrenal de los empresarios, si nos referimos  los dos al mismo país. El docente explica, con opinión personal, “que lo peor ha pasado”, sin manejar indicadores económicos alguno y con la sensación de que tampoco atiende  el análisis de las tendencias (deuda soberana, cifras del paro, caos político). Su apología la centra solo en la en las empresas, como en el cuento de la “hormiga y la cigarra”. Sí os repartisteis, “ahora no tienes” y si “guardaste” ahora podrías ser un prolífero neooportunista y comprar activos inmobiliarios a precio se saldo. ¡Vaya lección! para los miles de alumnos que deben estar cursando en la UPF y que la asignatura principal debe basarse en generar una nueva ética: La de la solidaridad.

El profesor entiendo focaliza en de la terna “Banca -Estado -Grandes Corporaciones” y se olvida de la base económica del país “la pyme” de corta maniobra empresarial la mayoría. Sus recomendaciones de libro, solo son posible en las grandes organizaciones que ahora actuando de forma semejante como narra la Odisea, con el gigante Polifemo, el de un solo ojo “codicia” y que se comió a varios de sus hijos “pymes”. La realidad de más de 50.000 afectadas pime en Catalunya por la crisis es que los poderosos con sus políticas las están destruyendo, aún habiendo nacido muchas para dar vida a las primeros.

Dice: <… recursos humanos (formación, incentivos), a la excelencia en los procesos (calidad total), a la mejora de la competitividad (innovación) y al marketing (potenciación de la marca, internacionalización). ¿No hace falta el de la ingeniería financiera? ¿Leyes aplicadas para la política de cobros? ¿Competencia desleal por economía sumergida? … básicas, fundamentales y determinantes hoy ,para sobrevivir. ¿O, no es así la realidad? Como el caso del lago Ness, en esta época del año hay artículos de entretenimiento que para distraer el estío cumplen. Pero la vida es más realista y, ahí quisiera ver a esos los profesores distantes de la realidad, calzados con los mocasines de las miles de autónomos, micro y medianas empresas, elucubrando sus directivos de cómo superar los próximos pagos de IRPF y el I.V.A.; momento en esos acusados de ser malos empresario, que hoy han llegado a están mal por no "haber guardado" y hayan leído el artículo y aún los maldigan por tontos despilfarradores.

Qué fácil es dar lecciones y opiniones cuando no hay que lidiar con la realidad de la vida. El pánico es el límite del miedo y este  miedo la respuesta biológica para potenciar la anatomía humana ante problemas inesperados. ¿El pánico llegará o no?, depende del poder de la Banca y la inteligencia del Estado, y si unos abren la puerta de la financiación y el otro perfecciona la legislación en la efectividad de los pagos. Tener pánico es de humanos ante la impotencia de ver como se desgarra el tejido industrial, cuando uno no tiene el privilegio de poder estar detrás de la barrera.