X_Sabona La actividad para crear puestos de trabajo, — nada fácil— no ha tenido los resultados esperados, aún habiéndose destinado altos presupuestos para ello. Tres acciones son la que he observado en estos últimos meses: Ayudar a empresarios y autónomos para permanecer activos. Segunda atraer inversores de otros países. Y, tercera los “planes de formación a desempleados”. Las dos primeras sin resultados positivos por las políticas del Ejecutivo y la última la de la formación por haber errado los organizadores en aplicar sobre las personas desempleadas los mismos métodos educativos diseñados para la formación continuada tradicional y ahí están las cifras de empleabilidad.

Nada más distinto de lo que ahora requiere la situación de la Economía del Empleo. Los organizadores de estos planes de formación, se han confundido, han focalizando la enseñanza ajustando planes educativos para adquirir destrezas de oficios que están diseñados para trabajadores en activo. La formación requerida por los actuales desempleados, es otra muy distinta en fondo y forma. Su estado de evidente incertidumbre ante su futuro, y en muchos casos ya soportando dolor traumático mental causado por la trasgresión de no encontrar salida a su situación y la desatención por parte de la altiva sociedad de los que tienen trabajo.  Se requiere una educación especial, profesores comprometidos y contenidos docentes al son de las circunstancias.

El desempleado necesita saber quién es, dónde está, porqué y como puede salir de ahí; antes que aprender habilidades y competencias profesionales. Saber que no su espera es una agonía en muchos de los casos. Deben de aprender que es un error pedir mucho a la vida, esperar a ser estimado y querido por la sociedad — los hechos demuestran que es así— Hay que en primer lugar enseñarles a desaprender a esperar a ser estimados y “aprender a querernos nosotros”, prescindir de la autoestima ahora más que nunca intangible y escurridiza. Solo superada esta meta, es cuando hay que entrar en la formación profesional en todos los casos y la formación de emprendeduría en muchos de ellos: El futuro económico de España está justamente en la capacidad emprendedora de quienes hoy aún no son empresarios.

¿Por qué este desatino en los planes de formación? Posiblemente la principal causa esté en los programas educacionales que no están diseñados para los actuales requerimientos de los discentes desempleados. También que los organizadores no han prestado atención objetivar con los requerimientos necesarios — posiblemente por falta de competencias o dedicación —, para descubrir las necesidades llegando al origen de las mismas: Filosofía del empleo. Han obviado que para educar hace falta una total predisposición cognitiva y estabilidad mental para dicha tarea. No han mapeado — los organizadores —, las más importantes necesidades del individuo en situación de desempleo. Se han limitado a “comprar” programas educativos como si se tratase de decidir el menú en su habitual restaurante de postín, No se les ha ocurrido que el escenario ha cambiado y que es determinante el acertar en el restaurante que la ocasión requiere, y no estimar que antes que las competencia profesionales está el ordenar el ánimo psicológico de la persona en situación de desempleo — por razonar al estilo storytalling, hoy tan de moda ahora—.

Los que hoy son empresarios ya han agotado su tiempo. Los organizadores que elucubran crear puestos de trabajo, se basan en la formación de desempleados dotándolos de capacidades como si la economía empresarial fuese la misma que en el Estado de bienestar, este ha sido el primer razonamiento. El segundo se focalizan en las acciones actuales sobre los empresarios y autónomos pensando que creen ampliarán sus negocios para crear puestos de trabajo. Labor casi imposible ya que todas las políticas son para ayudar a reducir plantillas, acotar mercados y buscar la competitividad con TIC —más reducción de personal— , se ha vendido la filosofía conservadora de hasta aquí hemos llegado “no pidas más a la vida”: Coge el dinero y corre.

Crear una nueva educación laboral, como tercer razonamiento. Todo ha cambiado en el ámbito laboral, menos el método educativo para la formación. Así empresas que se dedican a esta labor están haciendo el agosto vendiendo “más de los mismo” a una administración que tampoco sabe que debe comprar porque falta desarrollar el ideario de la Economía de la Empleabilidad con requerimientos como:

- Descubrir el origen donde se incuba esos nuevos puestos de trabajo

- Diseñar y emplear el método adecuado para ello

- Crear cuadros de docentes disruptivos para fidelizar la tipología de los nuevos alumnos poscrisis

- Emplear herramientas psicológicas para despertar la actitud de los potenciales alumnos mediante: la curiosidad, confianza-necesidad de los potenciales alumnos

- Crear nuevos contenidos educativos focalizados a realidades del mercado laboral

- Enseñar al alumno para administrar su Economía de la Atención en su entorno familiar, social y los medios neoculturales —aprender a discernir lo útil para él —

- Ayuda de especialistas sobre el nuevo discente antes de entrar en una formación de competencias profesionales ha de ordenar su mente para prescindir de la necesidad de autoestima y contar que él solo con su trabajo formativo podrá aspirar a tener un nuevo puesto de trabajo.

- APRENDER A DESAPRENDER: Formar a cuadros de organizadores y profesores para levantar un plan disruptivo. Aprender los docentes a no quejarse más, a dejar de ser amargados, a que no son el eje del mundo, cometiendo el error de considerarse demasiado. Desaprender a ser sofisticados y soberbios, los que lo sean, en definitiva: Alinear conocimientos para transformar la educación en España —LA EDUCACION ESTA SIEMPRE ANTES QUE LA ECONOMIA—.

La orientación de los desempleados tiene dos direcciones, distintas pero complementarias en función a experiencia, situación personal y posibilidades cognitivas:

Pasiva. Trabajadores para otros: Adquirir nuevas competencias y habilidades focalizado a cubrir un puesto de trabajo en el mercado actual o para las nuevas oportunidades que surgirán con el desarrollo de país. <Ver informe: Ideas para una nueva economía- Hacia una España más sostenible en 2025 >, soluciones para el empleo que presenta el Ejecutivo ([1])que no cubre ni la cuarta parte de lo que se requiere para los millones de casos a resolver, pero es una certera orientación hacia dónde vamos.

Activa. “Nadones” emprendedores: Hay que creer que hay más de un millón de personas en tránsito por el desempleo que con el apoyo de la psicoeducación pueden extraer de su mente esas capacidades clave para desarrollar actividades emprendedoras para solución en primera instancia su egoeconomía por instinto de su inteligencia capacitativa y subsidiariamente arrastrar en sus proyectos creando nuevos puestos de trabajo en el universo del desempleo actual a más de dos millones de trabajadores candidatos “pasivos”, que ahí están esperando.

¿Por qué 1.000.000 de potenciales emprendedores? Dos justificaciones son llevan a esta cifra: Necesitamos resolver más de tres millones de nuevos puestos de trabajo << qué no surgirán de las actuales empresas afectadas por la competitividad y merma de mercado. La gran mayoría aplicando su “plan B”— mercado global y anticrisis—, reduciendo su volumen de empleo, deslocalizándose y la dicotomía descorazonadora que generan las TICs que permiten ajustar a mínimos plantillas laborales >>. La segunda es surge de la siguiente hipótesis por carecer de modelos económicos que proyecten soluciones:

- Pasamos a estimar que existe al menos existe medio millón de nadones emprendedores entre las listas de desempleados (un 20%). Individuos que no renunciarán a sobrevivir profesionalmente con voluntad implícita en su inconsciente biológicamente para auto buscarse soluciones —muchos agotando ya su periodo de prestaciones—.

- Otros trescientos mil trabajadores candidatos en la trayectoria de acabar como desempleados en los próximos cinco años — por minimizar la cifra —, hoy trabajando y con cualificación media alta profesional, entre ellos los prejubilados con menos de 50 años de edad.

- Y, lo no esperado pero inevitable en la política pública de empleo público, es fácil de estimar que unas doscientas mil personas cualificadas, de las muchas miles que serán despedidas en el próximo quinquenio debido a la mermada realidad presupuestaría pública << muchas de estas personas afines al poder político y sus sinergias capaces de utilizar sus conexiones para captar oportunidades profesionales y empresariales>>

Hay que crear el modelo política de empleo partiendo de lo que hace falta y es dar y trabajo al menos a tres millones de personas antes del 2025 y para ello hay que crear una cartografía de las cosas que hay que hacer y las dos primeras son FORMAR A UN MILLON DE PERSONAS y sus correspondientes docentes.:

Siguientes post:

II) Situación emocional del desempleado y su protagonismo en la Economía del Empleo: La educación tradicional no es suficiente

III) Cómo capacitar más de 3.000.000 de personas en cinco años, para activar la Economía Empresarial en España


[1] Los siete nuevos sectores considerados son los siguientes: Energías renovables; Eco-industrias; Tecnologías de la Información y la Comunicación; Biotecnología; Industria aeroespacial; Industrias culturales; Servicios sociales