X_Langa dos (8) Las empresas surgen para que sus socios transformen en negocio sus  ideas especificadas en la descripción del objeto social de la misma. Cada uno de los componentes de la sociedad es clave y debe de aporta "valor" en el desarrollo de sus funciones mediante competencias y capacidades, y sobre todo innovación para el desarrollo, la capacidad comercial, la tecnología, la gestión y la ingeniería financiara. En estos tiempos de globalización, también es necesario que dichos los socios tengan capacidad para evolucionar y ajustarse a la exigencia que depara el futuro asumiendo nuevos conceptos como es la: Innovación Abierta. Es este caso un concepto a utilizar como denominador común determinante para asegurar liderar la porción de mercado objetivo a la que cada promoción emprendedora aspira.

Cada persona tiene el nivel de ética, conocimiento, habilidades y competencias que ha adquirido en su vida y aplicando técnica de management puede llegar a utilizar en toda su dimensión y capacidad toda esta experiencia, pero todo ello no es suficiente para lograr éxito empresarial en la nube del mundo global sin fronteras. Veamos, la capacidad creativa y resolutiva de una persona está determinada por el uso que haga de los pensamientos que almacena en la memoria de su cerebro, creados por recuerdos emocionales, datos razonados y habilidades adquiridas con la práctica. Ahí justo está la frontera que tiene el conocimiento individual y el riesgo o límite para acertar adecuadamente en su toma de decisiones. Lo individual siempre tiende a ser más pequeño que lo colectivo.

Un ejemplo esta en el mundo de la educación. Cuando se imparte formación de forma jerárquica sucede lo mismo; un docente solo puede transmitir al discente el conocimiento que sabe y no más. La alternativa evolutiva a esta limitación se llama “formación redáctica” basada en sumar los conocimientos de otros (en red) al acto de educar.

Los socios de las empresas de nueva creación, deben de establecer desde la fundación, no comportarse con un talante “cerrado ni jerárquico” sería un gran error que los desplazaría de las exigencias del siglo XXI donde fluye el conocimiento y la tecnología se desarrolla muy deprisa y al mismo tiempo en muchos países del mundo como efecto de la economía emergente. La predisposición del socio debe de ser “abierta y redáctica” y con ello atraer el conocimiento y potenciar la innovación interna de la empresa desde su nacimiento. Esta es la mejor forma de construir el camino para asegurar la porción de mercado-negocio a la que se aspira y causa final para la que se a creado la nueva empresa.

Un nuevo paradigma de posibilidades para la Emprendeduría, si las nuevas empresas en el momento de nacer lo hacen con el estigma de abrirse a utilizar además de la propias de sus socios las ideas de los demás. Expertos en estas iniciativas de estimular la Open Innovaron como Henry Chebrough y Xavier Marcet que están aportando con este enfoque el aprender a estimular la interacción entre empresas y crear flujos de conocimiento en todas las direcciones. En una nueva empresa si los socios actúan con pensamiento global, dispuestos a adquirir y a saber ceder conocimiento y con ello innovar, tienen asegurado un lugar en el espacio que empieza a definir la nueva economía de mercado. Hoy el nuevo orden de poder, aprecia y valora  el concepto red, comunidad y asociación de valores.